Hoy, como cada 8 de septiembre, es el Día Mundial de la Fisioterapia 2015 que este año, bajo el lema “Maximizando tu Potencial”, se dedica a personas con problemas de salud, discapacidades y dificultades de movilidad.

Los tratamientos que realizan los fisioterapeutas ayudan a estas personas, con alguna discapacidad o con problemas de salud a largo plazo -como la artritis o el Parkinson-, a desarrollar su potencial y participar plenamente en la vida social y familiar.

A partir del estudio y el análisis del movimiento corporal de las personas, pueden diagnosticarlas y tratarlas con el fin de ayudarlas a mejorar ese movimiento, corregirlo o mantenerlo, según el caso. Así, la fisioterapia ayuda, entre otras cosas, a fortalecer los músculos de personas con movilidad reducida, a mejorar la flexibilidad del paciente y reduce la tensión tanto física como mental.

Por ejemplo, las personas con esclerosis múltiple (EM) necesitan realizar ejercicio físico de forma regular para evitar otros problemas como el estreñimiento o reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Por otro lado, los masajes, manipulaciones, estiramientos y demás ejercicios que hacen los fisioterapeutas con sus pacientes ayudan a combatir el dolor o el dolor crónico -sobre todo si es de origen muscular- que sus enfermedades, sus discapacidades o su falta de movimiento les suelen provocar.

El Día Mundial de la Fisioterapia 2015 pretende, por tanto, poner en valor la figura del fisioterapeuta y de su labor profesional así como dotar a esta profesión de la importancia social que, desde luego en eSaludate, consideramos que merece. Profesionales que recurren, además, a técnicas de todo tipo para adaptarse a las necesidades del paciente a la hora de trabajar.

En el caso de niños con problemas, por ejemplo, muchos fisioterapeutas utilizan técnicas relacionadas con juegos que exigen su concentración por medio del entretenimiento; usan la música como vía para conectar con el paciente, o hacen sus ejercicios en el agua para facilitar los movimientos corporales...

Pero más allá del alivio físico y la ayuda sanitaria que los fisioterapeutas proporcionan a enfermos y discapacitados, cabe destacar también su labor psicológica y emocional con ellos. Aliviar su dolor o proporcionarles más movilidad, entre otras cosas, ayuda a mejorar también su estado de ánimo y su autoestima, cumpliendo con una labor social fundamental para la integración.


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